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lunes, 18 de febrero de 2013

Vamonos donde la gente no pueda juzgarnos.


He estado muchísimo tiempo sin escribir una entrada, bueno mejor dicho un capitulo. Me han pasado mil cosas por las cuales no pude escribir antes pero os juro (a mis poquitos seguidores) que seguiré escribiendo. :)

Buenos días por la mañana, pensé nada mas levantarme. Me tocaba enfrentarme a Mireya y aunque aun me doliese un poco la tripa no podía faltar un día mas a clase.
Me levante y quede mirando mi zapatilla de ir por casa, me volví a tumbar en la cama con la cara hundida en la cabecera cuando entro mi madre.
-Aitana- Me dijo con voz dulce -¿Estas mejor?. Levante la cabeza de mi escondrijo y la mire.-Si mama- Me sonrió y se acerco a mi cama.
-¿Sabes cielo?- Le mire expectante- Me ha contado tu hermana lo de Dario- Me senté en la cama  a su lado esperando que siguiese, pero en vez de eso me dio un abrazo, la verdad es que lo necesitaba y le correspondí el abrazo. Desayune me arregle y pa' fuera. 

A mitad de camino me encontré a Andra, le conté todo lo sucedido.
-Bueno...- Me dijo mirando al suelo -¿Que piensas hacer?
-No se, supongo que hoy hablare con ella.-
-Ya te digo que Cristina alomejor va con ella, las cosas están cambiando mucho- Me quede mirándola cuando por detrás se acercan Mireya y Cristina.
-Hola- Dijo Mireya, le dio dos besos a Andra y a mi me miro despectivamente. 
-Mireya ¿puedo hablar contigo?- Se soltó del brazo de Cristina y vino conmigo.
-¿Que te pasa?- Le dije con los brazos cruzados.
-¡Me pasa que eres una zorra! Que sabias que estaba enamorada de Miguel y aun así fuiste a por el, que lo de Dario fue sin querer que yo solo le seguía el juego que empezó el ¡Pero no!
-Mireya tranquilízate  Le dije sin subir la voz como ella. Se puso a llorar y nos fundimos en un abrazo. Supongo que a partir de ahi seguimos siendo amigas.

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